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• Los Fondos de Inversión Climática (CIF) dieron luz verde a una inversión de 70 millones de dólares para apoyar el crecimiento de la energía limpia en Turquía, movilizando mil millones de dólares adicionales en cofinanciamiento.
• Para 2035, Turquía pretende duplicar la capacidad eólica y cuadriplicar la solar, lo que requiere actualizaciones de la red inteligente para integrar 60 GW de nueva capacidad renovable.
• Se espera que el apoyo del CIF, junto con el BERD y el Banco Mundial, impulse los objetivos de cero emisiones netas de Turquía y permita una infraestructura energética más verde y flexible.

El consejo de administración de los Fondos de Inversión en el Clima (CIF) aprobó una inversión pionera de 70 millones de dólares para Turquía. Este plan respaldará las ambiciones de Turquía en materia de energía limpia impulsando la red eléctrica del país y catalizando 1 millones de dólares en financiación climática. Con esta iniciativa, Turquía pretende integrar un aumento sustancial de la energía renovable, como ha indicado el CIF en colaboración con el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD) y el Banco Mundial.

Objetivos ambiciosos de energía limpia
El plan de Turquía incluye duplicar la energía eólica y cuadruplicar la capacidad solar para 2035, avanzando hacia su objetivo de cero emisiones netas para 2053. Actualmente, Turquía ha aprovechado solo una fracción de su potencial solar y eólico terrestre: 3% y 15%, respectivamente. Alcanzar estos objetivos requerirá una red nacional confiable y adaptable, diseñada para manejar la variabilidad de las fuentes renovables.

Aporte de 70 millones de dólares del CIF
La plataforma de Integración de Energías Renovables (REI) de CIF impulsará un proyecto de 790 millones de dólares para transformar el sistema de transmisión eléctrica de Turquía, ampliando la infraestructura, fortaleciendo las conexiones y modernizándolo mediante tecnología de redes inteligentes. Además, una inversión de 330 millones de dólares se centrará en la flexibilidad energética con carga eléctrica descentralizada, redes digitalizadas y un aumento de 7,500 MW en la capacidad de las baterías. Estos avances permitirán a Turquía incorporar 60 GW adicionales de capacidad eólica y solar para 2035, lo que proporcionará energía a alrededor de 70 millones de hogares al año.

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Tariye Gbadegesin, directora ejecutiva de CIF, comentó, "Turquía cuenta con los recursos solares y eólicos necesarios para ejecutar uno de los proyectos de energía limpia más ambiciosos del mundo. Nuestro apoyo al desarrollo de una red nacional inteligente, flexible y con capacidad de respuesta ayudará a preparar al país para un aumento tan rápido de la energía eólica y solar intermitente. Es exactamente por eso que los Fondos de Inversión en el Clima y nuestros socios de los bancos multilaterales de desarrollo establecieron el programa de Integración de Energías Renovables (REI): para ofrecer financiación catalizadora y altamente concesional que resuelva las barreras de energía limpia en todo el sistema y abra el camino hacia un futuro más verde."

Apoyando un futuro sostenible

En asociación, Osman Çelik, viceministro de Hacienda y Finanzas de Turquíae, afirmó, “El camino de cero emisiones netas de Turquía hacia un futuro sostenible requiere el compromiso de fomentar la energía renovable... Catalizar inversiones en energía verde y limpia tiene gran importancia para aprovechar el potencial de nuestro país en energías renovables."

El programa REI, respaldado por el G7, es único por su enfoque exclusivo en la integración de energías limpias. La participación del CIF se alinea con la misión del Grupo del Banco Mundial de apoyar los esfuerzos de mitigación y adaptación al cambio climático a nivel mundial, en particular en regiones como Turquía, donde la transformación hacia energías renovables es una prioridad.

Nadia Petkova, directora general de Impacto y Alianzas del BERD, añadió:, “El Programa de Integración de Energía Renovable (REI) del CIF es un vehículo clave para ayudar a mejorar la flexibilidad de los sistemas energéticos para una integración fluida de mayores proporciones de generación de energía renovable variable e intermitente en la red y aumentar el acceso fuera de la red a la energía renovable”.

A medida que Turquía continúa su transformación energética, la inversión del CIF y las asociaciones en curso con el Banco Mundial y el BERD allanan el camino para un futuro energético más sostenible y diversificado, fomentando el crecimiento económico y la resiliencia.