Ejecutivos europeos respaldan normas más estrictas de sostenibilidad y diligencia debida: Encuesta de E3G
- El 63% de los ejecutivos de las cinco principales economías de la UE apoyan planes obligatorios de transición climática para las grandes empresas.
- La mitad de las empresas encuestadas afirman que los informes de sostenibilidad fortalecen las oportunidades de inversión, mientras que el 55% los vincula con la competitividad.
- Los líderes empresariales advierten que las reformas ómnibus de la UE corren el riesgo de aumentar los costos y socavar la alineación con los estándares globales de diligencia debida.
Las empresas europeas consideran la sostenibilidad un problema de competitividad
Una nueva encuesta a más de 2,500 altos ejecutivos en Francia, Alemania, Italia, España y Polonia revela un amplio apoyo a las normas vinculantes de sostenibilidad corporativa y diligencia debida, lo que va en contra de la dirección de las actuales reformas políticas de la UE.
La investigación, encargada por el grupo de expertos sobre clima E3G y realizada por YouGov en agosto de 2025, muestra que las empresas europeas consideran cada vez más los requisitos de gobernanza ambiental y social como fundamentales para su competitividad, potencial de inversión y posicionamiento global.
Más de la mitad de los encuestados (55%) afirmó que la sostenibilidad ambiental fortalece la competitividad de su empresa, cifra que asciende al 77% entre las medianas empresas. Los ejecutivos también destacaron las mejoras en la reputación y la rentabilidad, y el 59% describió la sostenibilidad como esencial para el valor de la marca y el crecimiento de los resultados.
Fuerte apetito por los planes de transición y la presentación de informes
El apoyo a la planificación obligatoria de la transición climática en virtud de la Directiva de Debida Diligencia Corporativa en Materia de Sostenibilidad (DDCSC) es especialmente pronunciado. Casi dos tercios (63 %) de los encuestados afirmaron que es justo exigir a las grandes empresas que publiquen sus planes de transición hacia una economía baja en carbono. Entre las empresas de entre 250 y 999 empleados, este porcentaje ascendió al 74 %.
Las obligaciones de presentación de informes de sostenibilidad en virtud de la Directiva sobre la presentación de informes de sostenibilidad corporativa (CSRD) también generaron apoyo. La mitad de los líderes encuestados cree que recopilar y publicar datos de sostenibilidad facilita el acceso al capital. Las empresas de mayor tamaño se mostraron aún más convencidas: el 68 % de las medianas y el 62 % de las muy grandes afirman que la presentación de informes contribuye a atraer inversión.
Cabe destacar que los ejecutivos se mostraron a favor de un alcance de información más amplio que el previsto en las actuales propuestas de reforma ómnibus de la UE. El umbral más popular para la divulgación obligatoria se fijó en 250 empleados, en consonancia con el marco original de la CSRD. En cambio, solo el 15 % apoyó limitar los requisitos a las empresas con 2,000 o más empleados.
Los líderes empresariales presionan por una alineación global
Dos tercios (68%) de los encuestados afirmaron que la UE debería dar ejemplo a nivel mundial en materia de estándares de sostenibilidad, lo que refleja la preocupación de que la reducción de los requisitos podría debilitar el liderazgo internacional de Europa. Casi la mitad (48%) coincidió en que unas normas ambientales y sociales sólidas otorgarían a las empresas europeas una ventaja competitiva a largo plazo sobre China y Estados Unidos.
Para las empresas con cadenas de suministro globales, esta opinión fue aún más contundente. El 69 % de las empresas con operaciones fuera de la UE afirmó que las prácticas de sostenibilidad impulsan la competitividad, mientras que el 62 % coincidió en que unas normas de diligencia debida rigurosas animarían a las grandes empresas a favorecer a los proveedores europeos debido a un cumplimiento más sencillo.
ARTÍCULO RELACIONADO: Tim Mohin: Las normas de sostenibilidad de la UE empiezan a hacer efecto
Resistencia a las reformas ómnibus
A pesar de este consenso, las instituciones de la UE están avanzando hacia la simplificación de las normas de finanzas sostenibles mediante el paquete Ómnibus, un proceso que muchos ejecutivos consideran contraproducente. El 42 % afirmó que las reformas corren el riesgo de desviarse de los estándares internacionales, como las directrices de la OCDE, lo que podría incrementar los costos y los riesgos legales.
Casi la mitad (48%) de los líderes empresariales afirmó que la incertidumbre legal en torno al Ómnibus ya está retrasando las decisiones de inversión, siendo el efecto más pronunciado entre las empresas más grandes. Casi dos tercios (63%) de las empresas medianas informaron haber suspendido la asignación de capital debido a la falta de claridad en los requisitos regulatorios.
E3G señaló que los resultados de la encuesta muestran una brecha cada vez mayor entre los responsables de las políticas que buscan simplificar las obligaciones y los líderes empresariales que ven los marcos de sostenibilidad estructurados como un camino hacia el crecimiento y la resiliencia.
Implicaciones políticas, financieras y de gobernanza
Para los altos ejecutivos y los inversores, los hallazgos ponen de relieve una doble realidad. Las empresas europeas están considerando la sostenibilidad no como una carga regulatoria, sino como una necesidad competitiva que atrae capital y mitiga los riesgos de la cadena de suministro. Al mismo tiempo, el cambio en la política de la UE amenaza con generar incertidumbre y debilitar la credibilidad de Europa a la hora de establecer estándares ESG globales.
La encuesta también subraya una preocupación estratégica más amplia: mientras los mercados estadounidense y chino avanzan rápidamente en materia de políticas industriales verdes, los líderes empresariales europeos consideran que una gobernanza ESG sólida es fundamental para preservar la ventaja global de Europa.
Importancia mundial
Los datos tienen peso más allá de Europa. Dado que los inversores globales buscan claridad en la información y la diligencia debida, cualquier retroceso de la UE podría repercutir en las cadenas de suministro y los mercados de capitales de todo el mundo. La encuesta sugiere que muchas empresas europeas ya han interiorizado la justificación empresarial de la sostenibilidad, incluso mientras se prolongan las negociaciones políticas en Bruselas.
El mensaje de los directorios de cinco de las mayores economías de Europa es claro: unas normas de sostenibilidad sólidas no son una amenaza para la competitividad, sino una base para ella.
Lea la encuesta de la empresa YouGov encargada por E3G aquí.







